Las noticias que estamos recibiendo sobre los icebergs no son precisamente alentadoras y deberían obligar a los países a tomar medidas más drásticas. El iceberg A23a, alguna vez considerado el más grande de la Tierra, se encuentra en una «danza continua».
El Iceberg A23a es uno de los icebergs más grandes del mundo y lleva varias décadas a la deriva. Esta enorme masa de hielo se desprendió de la plataforma de hielo Filchner-Ronne en la Antártida a principios de los años 1980.
A23a tenía una superficie de unos 3.300 kilómetros cuadrados, lo que lo convierte en uno de los icebergs más grandes jamás registrados. Actualmente, esta marca del iceberg más grande del mundo pertenece a la A-76, que tiene 170 kilómetros de largo y 25 kilómetros de ancho, con una superficie total de 4.320 kilómetros, según la Agencia Espacial Europea (ESA).
El iceberg gira lentamente a un ritmo de unos 15 grados por día
De acuerdo a Estudio Antártico BritánicoA23a se encuentra en una danza en constante rotación, en medio de una poderosa corriente oceánica. Resulta que el iceberg gira lentamente a un ritmo de unos 15 grados por día.
Según la BBC, en noviembre, el iceberg ya había superado el extremo norte de la Península Antártica, y el camino sería fundirse en las cálidas aguas del Atlántico Sur.
Pero A23a baila en un fenómeno llamado penacho de Taylor. Este fenómeno hidrodinámico ocurre en fluidos en rotación, especialmente en ambientes dominados por la rotación, como océanos, atmósferas planetarias, etc.
Los icebergs reciben el nombre del cuadrante antártico en el que fueron avistados originalmente, seguido de una letra secuencial. Si el bloque de hielo se rompe más tarde, como sucede a veces, cada trozo añade una letra secuencial a su nombre.
