La destrucción en la Franja de Gaza no tiene límites: las imágenes de satélite de la Franja de Palestina mostraron la demolición de muchas infraestructuras vitales y la destrucción de ciudades. Observe los mapas a continuación, que resaltan los edificios que sufrieron daños durante los seis meses de conflicto, que comenzaron en octubre, noviembre, enero y marzo pasados.
Hasta el 57% de los edificios de la Franja de Gaza resultaron dañados o destruidos, según un análisis realizado por el centro La Universidad Estatal de OregonPero el porcentaje aumenta al 75% en la ciudad de Gaza. La capital del enclave palestino fue el objetivo inicial de los ataques israelíes en respuesta al ataque más mortífero perpetrado por miembros de Hamás. Comparar imágenes de satélite de antes de la guerra con imágenes actuales nos permite seguir la ciudad destruida, especialmente en los barrios más cercanos al mar.
Según el diario español El País, las imágenes tomadas por el satélite Sentinel-2 de la Agencia Espacial Europea revelan la magnitud de la tragedia.
Con el paso de los meses, el ejército israelí amplió sus ataques al sur de la Franja, donde los civiles se vieron obligados a retirarse mientras la ciudad de Gaza estaba sitiada.
Más de 33.000 palestinos han muerto desde que comenzaron los combates, según datos del Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás. Según UNICEF, había al menos 13.000 niños. La destrucción de la infraestructura sanitaria impide que la población civil obtenga atención médica básica, medicamentos o tratamientos vitales.
En Rafah, la última ciudad palestina antes de la frontera con Egipto, más de 1,4 millones de personas desplazadas han sido excluidas de la población total de Gaza de 2,2 millones.
Organizaciones internacionales han advertido que la situación de más de la mitad de la población de Gaza que aún vive es «catastrófica». Toda la población de la Franja sufre desnutrición, un millón de personas han perdido sus hogares y dos de cada tres han sido desplazadas, según estimaciones de un informe de las Naciones Unidas y el Banco Mundial.
