Como en versiones anteriores, Microsoft se centró en el menú Inicio como una de las nuevas características de Windows 11. Este elemento ha sido rediseñado y ahora está ubicado en el centro de la conocida barra de tareas.
Como un cambio que no fue del agrado de todos, pronto surgieron formas de cambiarlo y ponerlo donde se esperaba. Ahora, con la primera actualización de Windows 11, Microsoft ha terminado con esta posibilidad y el menú Inicio vuelve a su nuevo estado.
De forma predeterminada, las grandes discusiones sobre Windows se centran en el menú Inicio. Este fue un escenario visto en Windows 8 e incluso Windows 10, aunque en un grado mucho menor. En el caso de Windows 11, no parece ser diferente, nuevamente debido a este elemento.
El cambio que Microsoft implementó en el menú Inicio en su nueva versión es el más obvio. Esta barra se ubica en el medio de la barra de tareas, con un nuevo diseño y una imagen completamente diferente, enfocándose también en los últimos archivos que se abrieron o crearon allí.
Por supuesto, al probar esta versión, se descubrió cómo recuperar rápidamente el menú Inicio clásico en el lado izquierdo de la barra de tareas. Con un pequeño cambio en el registro de este sistema, todo volvió a su forma original, a la que muchos están tan acostumbrados a utilizar.
Microsoft ha terminado con este escenario con la nueva versión de Insider que lanzó a fines de la semana pasada. Elimina permanentemente las entradas del registro que le permitieron cambiar el menú Inicio a su ubicación clásica y lo coloca en la ubicación original de Windows 11.
Es cierto que estos son modelos de prueba y pueden sufrir cambios profundos con el tiempo, ganando y perdiendo funciones. Sin embargo, parece ser un cambio que es poco probable que Microsoft revierta en el futuro. El nuevo menú Inicio es, sin duda, el sello distintivo de Windows 11.
Con este cambio, Microsoft también está demostrando que no quiere que los usuarios cambien Windows 11, especialmente en el registro del sistema. Alberga componentes esenciales del sistema que los usuarios no deben cambiar simple o directamente.
